Tengo una gran alegría de presidir, por primera vez, la solemne eucaristía que se celebra en la fiesta de la Reliquia de San Jorge. Os felicito por esta fiesta de la Reliquia porque subraya claramente la dimensión religiosa de nuestras fiestas de Moros y Cristianos.
San Jorge es un Santo que, por sus propios e insignes méritos, ha entrado en el mundo de la leyenda. Es una especie de caballero andante celestial, desfacedor de entuertos, protector de los inocentes y de los injustamente oprimidos y perseguidos. Os deseo y pido a San Jorge que los bañerenses estén siempre adornados de tan nobles y cristianas virtudes.
2 Septiembre 2001
+ Rafael Sanus
Obispo auxiliar emérito de Valencia