Hace 25 años Dios me trajo a esta tierra, en ella aprendí a amar a San Jorge, aprendí a experimentar su intercesión que vence al Dragón que paraliza la ilusión, el optimismo y la esperanza de un mundo mejor; entre vosotros, comunidad cristiana de Banyeres, aprendí a depositar, como San Jorge, mi confianza en el Señor; a descubrir en vuestras fiestas un signo de que es posible un mundo mejor, más humano y acogedor, más lleno de luz y alegría … Por todo ello doy gracias a Dios.
23 de Abril del 2002
José María Payá Mataix